La ingle es una zona delicada y en la que las personas somos susceptibles de sufrir hernias fruto de un esfuerzo o simplemente como consecuencia de la debilidad de las paredes abdominales. La hernia inguinal se produce en el momento en que un tejido perteneciente a nuestros intestinos aprovecha esa debilidad de las paredes abdominales para sobresalir hacia afuera y crear una protuberancia, en este caso surgida en una zona próxima a los genitales, que puede provocar dolor e incomodidad en la zona.
No tenemos que mencionar el problema de la hernia inguinal como uno que se pueda catalogar como de naturaleza grave o muy grave, pero sí que es realmente doloroso y conviene subsanar el problema acudiendo cuanto antes a que sea revisado por un profesional en cirugía. En la clínica del Dr. Alberto Parajó Calvo podemos darle una diagnóstico y solución a este problema a través de cirugía laparoscópica con la que logramos reducir los tiempos de recuperación y también las señales de la operación en forma de cicatrices.
¿Cómo es la operación?
Lo primero que se debe hacer antes de proceder a la cirugía es un correcto diagnóstico con el que saquemos conclusiones sobre qué es lo que tenemos delante. Hay dos tipos de hernias inguinales; las directas y las indirectas. En la mayor parte de los casos nos encontraremos ante una hernia inguinal indirecta, esto es, cuando la hernia se introduce a través del canal inguinal para salir por el orificio inguinal, algo que ocurre con mayor frecuencia en pacientes varones. Las hernias inguinales directas suelen producirse próximas a la parte final del músculo aprovechando un defecto en la pared abdominal.
Una vez se sabe de qué tipo de hernia estamos hablando, podemos proceder a planificar la cirugía. Como ya hemos citado, en la clínica del Dr. Alberto Parajó Calvo hacemos uso de la cirugía laparoscópica para esta intervención. Se realiza una pequeña incisión en un lugar próximo a la hernia y o bien se reintroduce poco a poco la hernia dentro del abdomen, o se extirpa el saco de la hernia dependiendo de la situación. Para acabar se dan unos puntos de sutura para cerrar la pared abdominal o el punto crítico por el que se introdujo esa hernia.
El postoperatorio
Durante los primeros días después de operarse un paciente puede sentir alguna molestia, pero los plazos de recuperación son más cortos gracias al uso de la laparoscopia como técnica para la cirugía. Lo más recomendable es no realizar demasiados esfuerzos durante al menos los primeros 20 días después de haber pasado por las manos del cirujano.
A partir del mes y medio ya se puede recuperar una vida normal totalmente plena y, si se practica deporte, volver a la rutina de ejercicio intenso con total normalidad siempre y cuando ya no se noten molestias ni dolor en la zona.
Si sufre de una hernia inguinal que le impide hacer una vida normal y siente mucho dolor en la zona, no espere mucho más a ser atendido por un profesional. El Dr. Alberto Parajó Calvo cuenta con consulta tanto en Vigo como en Ourense y podrá darle un diagnóstico claro y rápido para ponerle fecha a la intervención con la que subsanar su problema. Contacte con nosotros.